Lo que comenzó como una emergencia médica terminó convirtiéndose en una pesadilla para un grupo de padres de Jarabacoa.
El 28 de octubre, 21 niñas del Centro Educativo Manuel Ubaldo Gómez ubicado en Jarabacoa, fueron hospitalizadas tras un suceso extraño donde sufrieron «crisis de ansiedad colectiva». Un diagnóstico no oficial.
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Luego de recibir el alta médica, las últimas cuatros menores que quedaron ingresadas en Jarabacoa, fueron trasladadas al Hospital Morillo King de La Vega, desde donde representantes del Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani) las traslado sin que sus familiares fueran notificados ni se les brindara explicación alguna sobre el procedimiento judicial.
Cuatro días después, las familias continúan sin saber con certeza dónde están sus hijas ni bajo qué justificación legal fueron apartadas de su custodia.
“Mi nombre es Salvador García, padre de una de las niñas que Conani se llevó sin justificación alguna, sin comunicación, sin decir nada. Han pasado 4 días y no sabemos sobre nuestras niñas”, declaró García, acompañado de varias madres.
Indicaron que las pruebas de antidoping que les fueron realizadas dieron resultados negativos a todas las sustancias narcóticas evaluadas, por lo que no entienden las razones por las cuales se llevaron a las niñas de entre 12 y 14 años.
“Tenemos todas las evidencias, los resultados del antidoping y las evaluaciones médicas que se les realizaron desde el primer día. Ninguna dio positivo a ninguna sustancia ilícita”, aseguró García.
Los progenitores manifestaron que están dispuestos a colaborar con cualquier investigación o evaluación psicológica o médica que las autoridades consideren necesaria, pero exigen transparencia y respeto a sus derechos como padres.
«No nos oponemos a que sean evaluadas o tratadas, pero queremos que se respete el debido proceso y que se nos informe dónde están nuestras hijas”, insistió García, quien hizo un llamado directo a la procuradora general de la República Yeni Berenice Reynoso, y a la magistrada titular de la Dirección Nacional de Niñas, Niños y Adolescentes, Olga Diná Llaverías, para que intervengan en el caso.
Hasta el momento las autoridades de educación no han ofrecido detalles sobre el episodio de las estudiantes. Mientras que, Conani alega la retención de las menores «tiene carácter temporal, preventivo y de resguardo, con el objetivo de garantizar la integridad física y emocional de las retenidas», en un comunicado colgado en sus redes sociales.


