Santo Domingo.- Este sábado estuvo lleno de emociones, sorpresas y reencuentros familiares en La Casa de Alofoke 2, con la visita de las familias y algunos de los participantes.
La esposa del humorista Juan Carlos Pichardo, Carmen Paniagua, y su hija Sophia, visitaron al humorista, al igual que la esposa de Shadow Blow y sus dos hijos, así como los hijos de La Perversa, acompañados de la creadora de contenido Katherine Páez, conocida como «La Pomposa».
Te puede interesar… Juan Carlos Pichardo recibe la visita de su esposa e hija en “La Casa de Alofoke 2”
La visita de estas familias trajo momentos divertidos e inesperados que rápidamente se viralizaron en las redes sociales. Uno de los momentos más destacados fue cuando el hijo menor de Shadow Blow pidió a una de las marcas patrocinadoras del proyecto que lo patrocinara a él también, para poder tomar la bebida gratis. Posteriormente, le dijo a Luis, uno de los integrantes del programa, que no sabía muy bien cómo le estaba yendo en el reality, ya que su única preocupación era su papá, el artista Shadow Blow.
Otro momento gracioso fue protagonizado por Sophia, la hija de Juan Carlos Pichardo. La pequeña le confesó a su papá que para sentirse más cerca de él, había estado usando la almohada de embarazada de su mamá, lo cual generó muchas risas. Luego, cuando Juan Carlos le preguntó qué opinaba sobre cómo lo veía dentro de la casa, Sophia respondió de manera espontánea que lo único que realmente le interesaba era estar dentro del jacuzzi de La Casa de Alofoke.
Más tarde, llegó el turno de La Perversa, quien celebró el primer cumpleaños de su hijo Jaden con una fiesta divertida, llena de risas, juegos en un tobogán, lanzamientos de pelotas y pastel. Los participantes del programa se unieron a la celebración, volviendo a ser niños por un rato.
Sin duda, La Casa de Alofoke no es solo un reality de convivencia, sino una plataforma de entretenimiento que fusiona momentos de humor, emoción y sorpresa, donde los participantes y sus familias se convierten en los protagonistas.
