Boston. En una jornada inolvidable en el Fenway Park, el antesalista dominicano Rafael Devers brilló con luz propia al fijar una nueva marca personal de ocho carreras impulsadas, liderando la abrumadora victoria de los Medias Rojas de Boston 19-5 sobre los Orioles de Baltimore en el primer juego de una doble cartelera.
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Devers fue el protagonista absoluto en el imponente rally ofensivo del equipo, conectando un jonrón de tres carreras en la sexta entrada y posteriormente un grand slam en el octavo, este último ante el jugador de posición puertorriqueño Emmanuel Rivera, quien subió al montículo por los Orioles para contener la ofensiva. El batazo de Devers coronó una entrada de 13 carreras para los locales. El toletero terminó el encuentro de 6-4, con dos cuadrangulares y ocho empujadas.
El triunfo también sirvió como respuesta emotiva a la salida por lesión de Alex Bregman, quien abandonó el juego en la quinta entrada debido a molestias en el cuádriceps derecho. Bregman, pieza clave en la ofensiva bostoniana este año, evitó lo que parecía una lesión más grave y se espera que su evolución sea favorable.
El abridor de Baltimore, Gregory Soto, fue víctima del primer jonrón de Devers, un imponente batazo de 408 pies que salió disparado a 108.1 mph, según Statcast. Boston tomó así la ventaja definitiva en un juego que hasta entonces lucía reñido.
Esta actuación llega en un momento clave para los Medias Rojas, que han sufrido múltiples bajas, incluyendo la del inicialista Triston Casas por el resto de la temporada. El equipo demostró profundidad y carácter, alimentando la esperanza de sus fanáticos de cara al tramo medio de la campaña.
