El cofundador de Microsoft y filántropo Bill Gates declaró este jueves a la agencia AFP que resulta “trágico” que las muertes infantiles aumenten en todo el mundo por primera vez en lo que va del siglo, debido a que los países occidentales más ricos han reducido drásticamente la ayuda internacional.
Estados Unidos ha aplicado los recortes más profundos, y Gates afirmó que el denominado Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, por sus siglas en inglés) creado por su colega multimillonario Elon Musk es “responsable de muchas muertes”.
El Reino Unido, Francia y Alemania también han reducido la ayuda de manera “desproporcionada”, señaló Gates —principal financiador de numerosos programas de salud global— durante una entrevista en video desde Seattle.
Los recortes implican que el número de niños que morirán antes de cumplir cinco años ascenderá a 4,8 millones este año, lo que supone 200.000 más que en 2024, según el informe anual Goalkeepers de la Fundación Gates, publicado el jueves.
Gates calificó de “tragedia” el repunte de la mortalidad infantil, que había descendido de forma sostenida desde los aproximadamente 10 millones de muertes anuales registradas a comienzos del milenio.
La ayuda destinada a los países en desarrollo ha caído un 27 % este año, poniendo en riesgo los avances frente a diversas enfermedades, como la malaria, el VIH y la poliomielitis, según el informe.
Si los recortes globales de alrededor del 30 % se consolidan, 16 millones de niños adicionales podrían morir de aquí a 2045, según estimaciones del Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud (IHME), financiado por la Fundación Gates.
“Eso significa 16 millones de madres que enfrentarán una experiencia que nadie quiere ni debería tener que vivir”, señaló Gates.
Recortes “caóticos” del DOGE
Gates criticó la “situación caótica” que se produjo a comienzos de este año, cuando el DOGE de Musk interrumpió de forma abrupta las subvenciones gestionadas por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), la cual ha sido desmantelada desde el retorno de Donald Trump a la Casa Blanca en enero.
“Estoy hablando con el presidente Trump para intentar convencerlo de restablecer la ayuda, de modo que el recorte sea, en el peor de los casos, moderado. No sé si lograré tener éxito”, afirmó el empresario de 70 años.
Gates, uno de los principales donantes de la alianza Gavi —responsable de la distribución de vacunas en todo el mundo—, afirmó sentirse decepcionado de que Estados Unidos no renovara su financiamiento para la organización en junio.
El secretario de Salud estadounidense, Robert F. Kennedy Jr., también envió un video al evento de recaudación de fondos de Gavi “en el que reiteraba sus opiniones extremadamente refutadas y erróneas de que estas vacunas infantiles no deberían utilizarse”, señaló Gates.
“Aunque la Fundación Gates colabora con todas las administraciones —y encontramos ciertos puntos de acuerdo con el secretario Kennedy en lo relativo a las vacunas—, tenemos visiones esencialmente opuestas sobre el papel que las vacunas han desempeñado en el mundo”.
Presupuestos restrictivos
Si bien reconoció que “los presupuestos del mundo desarrollado están muy ajustados”, Gates lamentó que la ayuda internacional esté siendo “desproporcionadamente” objeto de recortes en los países europeos.
Asimismo, indicó que había hablado sobre estos recortes con líderes políticos en Francia, donde el presupuesto aún no se ha cerrado.
“Hablé con el primer ministro y con el presidente, entre otros, y les dije: por favor recuerden la importancia de esto… pero la situación presupuestaria es muy difícil”.
Gates expresó también su confianza en que nuevas herramientas —como vacunas innovadoras— permitirán reducir nuevamente las tasas de mortalidad infantil en los próximos cinco años.
En particular, destacó las nuevas vacunas contra el virus respiratorio sincitial (VRS) y la neumonía, así como una inyección preventiva contra el VIH de administración semestral llamada lenacapavir, que comenzó a distribuirse esta semana en Sudáfrica.
La Fundación Bill y Melinda Gates fue creada en el año 2000; Melinda French Gates se retiró el año pasado tras el divorcio de la pareja.
En mayo, Gates anunció que donaría su fortuna —superior a los 200.000 millones de dólares— a lo largo de las próximas dos décadas, culminando este proceso en 2045.
Jessica Sklair, investigadora en filantropía de élites en la Universidad Queen Mary de Londres, declaró a la AFP que Gates ya ejerce “una influencia enorme en el ámbito de la salud global”.
Los recortes a la ayuda probablemente incrementarán esa influencia, añadió, señalando que no parece que la filantropía privada vaya a “intervenir para cubrir el vacío”.
Otra investigación del Instituto de Salud Global de Barcelona, publicada en exclusiva por la AFP el mes pasado, concluyó que más de 22 millones de personas podrían morir por causas prevenibles de hoy a 2030 debido a los recortes de ayuda en Estados Unidos y Europa.


