MADRID.– El golfista español Jon Rahm quedó sin opciones de conquistar su cuarto título del Abierto de España tras una discreta actuación este sábado en la tercera ronda, en la que reconoció haber cometido “errores estúpidos” que le impidieron avanzar en la clasificación general.
Ante un público entregado en el Club de Campo Villa de Madrid, que no dejó de animarle con el clásico “¡Vamos, Jon!”, el vasco firmó una tarjeta de 71 golpes (par del campo) para situarse con un acumulado de -4, muy lejos de los líderes del torneo.
“He cometido errores estúpidos toda la semana. A ver si mañana puedo jugar 18 hoyos sólidos y sin fallos”, admitió Rahm tras finalizar su recorrido, lamentando que “cuando las cosas no salen, duele más todavía”.
El “León de Barrika” inició la jornada a cinco golpes de la cabeza —entonces en manos del inglés Marco Penge— y con ilusiones de pelear por el título. Un mal comienzo con ‘bogey’ en el hoyo 1 fue compensado con un espectacular ‘eagle’ en el 4 y tres ‘birdies’ consecutivos del 6 al 8, que lo catapultaron temporalmente a la parte alta de la tabla.
Sin embargo, un nuevo ‘bogey’ en el 5 y su primer doble ‘bogey’ del torneo en el 11 derrumbaron sus aspiraciones. Rahm mostró su frustración con un gesto de enojo tras ese hoyo, y explicó que el campo “estaba muy complicado, con ‘greens’ duros y pequeños” que castigaban cualquier imprecisión.
El jugador también señaló que el terreno aún sufre las secuelas de la borrasca Filomena (2021):
“Desde entonces el campo ha tenido que recuperarse. Es fácil decir que hay que mejorar, pero después de una tormenta tan dura es complicado.”
Antes de hablar con los medios, Rahm protagonizó un emotivo momento al abrazar a su hijo Kepa, de cuatro años, que lo esperaba en el hoyo 18.
El Abierto de España continuará este domingo con la ronda final, donde Rahm buscará cerrar con una actuación sólida ante su público, aunque sin opciones de levantar el trofeo.


