San Juan.- El Coliseo de Puerto Rico se ha convertido en el epicentro de la celebración cultural y musical boricua gracias a la residencia artística de Bad Bunny, que continúa atrayendo a miles de fanáticos cada fin de semana.
Desde tempranas horas, el entusiasmo se hace sentir en los alrededores del recinto, donde seguidores de todas las edades llegan para asegurar su entrada y disfrutar de un espectáculo que ha sido calificado como una experiencia inolvidable.
Los testimonios del público reflejan la intensidad de esta vivencia. “Bueno, mi nombre es Edu, vengo de Manatí. Estoy bien pompiado para el concierto, claro, soy fanático. Mi familia quiso venir 4 horas antes porque sabían que se iba a explotar, esto está demasiado. Y siento un gran orgullo porque parece como que hoy es el día del puertorriqueño en Puerto Rico, la semana de Puerto Rico, todo el mundo está vestido de puertorriqueño”, compartió uno de los asistentes.
También desde Coamo, Patricia Larrauri Torres expresó su entusiasmo: “Buenas, mi nombre es Patricia Larrauri Torres, soy de Puerto Rico, de Coamo específicamente, y aquí estamos en la residencia de Bunny en la Isla del Encanto”. A su vez, Kiara Roque Fuentes, proveniente de Cidra, no ocultó sus expectativas: “Espero pasarla cabrón en la residencia de Baconi”.
Entre los asistentes también se encontraba una pareja de hermanos, quienes vivían su primer concierto. “Hola, mi nombre es… y mi nombre es Noa. Nosotros dos somos hermanos y estamos aquí en el cosito de Bonnie. La estamos pasando superbien, un ambiente bien puertorriqueño, bien cultural de aquí de Puerto Rico. Espero pasarla superbien aquí con mi hermano Noa”, comentó uno de ellos, mientras el otro añadía: “Este es mi primer concierto, no sé qué esperar. Espero pasarla bien y vamos para encima. Vamos para encima, vamos para encima”.
Las presentaciones, programadas hasta septiembre, se celebran cada viernes, sábado y domingo. Aunque los primeros conciertos están reservados para el público local, a partir de la décima fecha se permitirá el ingreso de visitantes internacionales. Con esta residencia, Bad Bunny busca no solo conectar con sus seguidores, sino también proyectar a Puerto Rico como destino de referencia cultural y turístico, justo antes de iniciar su gira mundial en noviembre en República Dominicana.