Peyragudes (Francia) (EFE).- El esloveno Tadej Pogacar se impuso en la cronoescalada de Peyragudes, su cuarta victoria en este Tour de Francia, 21 en total, y apuntaló el liderato en la general sobre el danés Jonas Vingegaard, que fue segundo.
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El ciclista del UAE, camino de su cuarto Tour, el segundo consecutivo, aventajó al danés en 36 segundos en los casi 11 kilómetros cronometrados disputados en Pirineos, y tiene ahora una renta de 4.07 en la general.
El belga Remco Evenepoel, que había ganado la primera contrarreloj del Tour, totalmente plana, no marcó un buen tiempo en Peyragudes, donde perdió 2.39 con el ganador, pero conserva la tercera plaza de la general, a 7.24 de Pogacar.
Le pisa los talones el alemán Florian Lipowitz, que fue cuarto en la meta, a 1.56 del esloveno, y que solo está seis segundos por detrás de Evenepoel, tercero del podio de París del año pasado, en la general.
El tercero de la etapa fue el esloveno Primoz Roglic, compañero de Lopowitz en el Red Bull, pero que en la general está más atrasado, séptimo a 8.50.
Pogacar: «Casi exploto al final, pero ver el crono me dio un impulso extra»
Pogacar dijo que corrió sin pinganillo y reconoció que en el tramo final estuvo a punto de «explotar» pero que recuperó ánimos al ver las diferencias que iba sacando a sus rivales.
«Estoy muy contento con el resultado, esta etapa era una incógnita para nosotros y la hemos preparado muy bien con el equipo. Quería que todo saliera perfecto. Mi objetivo era darlo todo desde el principio», aseguró el campeón del mundo.
El líder de la general del Tour reconoció que en el tramo final tuvo algún problema, por lo que decidió levantar el pie del acelerador.
«Casi exploto al final, pero vi el cronómetro en la parte superior de la meta y me dio un impulso extra porque me demostró que la estrategia había dado resultados», señaló.
El ciclista esloveno afirmó que salió a la etapa sin pinganillo, porque la intención era «ir a tope en todo momento», y se basó «en las diferencias que iba viendo en los puntos de paso».