Cada 18 de julio, en coincidencia con el nacimiento de Nelson Mandela, la comunidad internacional conmemora el Día Internacional de Nelson Mandela, una jornada proclamada por la Asamblea General de la ONU para reconocer la lucha incansable del líder sudafricano por la igualdad, la libertad y los derechos humanos.
La fecha invita a personas de todo el mundo a dedicar 67 minutos de servicio comunitario, en honor a los 67 años que Mandela dedicó a trabajar por el bien común, desde su papel como activista contra el apartheid hasta su histórica elección como primer presidente negro de Sudáfrica.
Un legado de transformación
Nelson Mandela (1918–2013) se convirtió en un símbolo mundial de resistencia pacífica, reconciliación y dignidad humana. Su legado sigue siendo una fuente de inspiración para quienes luchan contra la injusticia social, el racismo y la pobreza.
En la resolución 64/13 de la Asamblea General se reconocen los valores de Nelson Mandela y su dedicación al servicio de la humanidad a través de su labor en los ámbitos de la solución de conflictos, las relaciones interraciales, la promoción y protección de los derechos humanos, la reconciliación, la igualdad entre los géneros, los derechos de los niños y otros grupos vulnerables, así como la lucha contra la pobreza y la promoción de la justicia social.
Se reconoce también su contribución a la lucha por la democracia a nivel internacional y a la promoción de una cultura de paz en todo el mundo.
Reglas Nelson Mandela
La Asamblea General decidió en diciembre de 2015 ampliar el alcance del Día Internacional de Nelson Mandela, que se observa cada año el 18 de julio, para que también se utilice a fin de promover condiciones de encarcelamiento dignas, sensibilizar acerca del hecho de que los reclusos son parte integrante de la sociedad y valorar la labor del personal penitenciario como importante servicio social.