Nueva York.- El verano en la ciudad de Nueva York no es cosa de juego. Entre los sofocantes viajes en metro y el calor implacable de las aceras, mantenerse fresco no solo es cuestión de comodidad, sino de seguridad. Afortunadamente, la ciudad está desplegando recursos importantes para ayudar a los neoyorquinos a refrescarse, desde más de 60 piscinas públicas gratuitas hasta cientos de centros de enfriamiento.
Las piscinas al aire libre están abiertas todos los días de 11 de la mañana a 7 de la noche en los cinco distritos, con una pausa de limpieza entre las 3 y las 4 de la tarde. La entrada es gratuita, pero en los días calurosos las filas pueden ser largas, así que lo mejor es llegar temprano, mantenerse hidratado y revisar las reglas de vestimenta antes de ir.
Las piscinas bajo techo están disponibles todo el año. Las tarifas de membresía son bastante accesibles: son gratuitas para jóvenes de hasta 24 años, y para adultos de 25 a 61 años cuestan $150 al año, mientras que los adultos mayores (62+), veteranos y personas con discapacidad solo pagan $25 anuales.
NYC Parks también ofrece clases de natación gratuitas para casi todas las edades, desde niños pequeños de 18 meses hasta personas mayores. Los cupos se llenan rápido, así que es importante revisar la disponibilidad en línea desde temprano en la temporada.
Antes de Nadar: Verifica el Clima y Protege tu Piel
El clima en New York durante el verano puede cambiar rápidamente. Las tormentas eléctricas, alertas de rayos UV o advertencias por mala calidad del aire pueden afectar tus planes. Siempre consulta al Servicio Meteorológico Nacional (NWS-NY) o el pronóstico de NBC antes de salir.
Y no hay excusas para no usar protector solar. La protección solar no es negociable, ya sea que vayas a la piscina, a la playa o simplemente a pasear al perro. Reaplica con frecuencia, usa sombrero y considera ropa con protección UV si estarás mucho tiempo al aire libre.
Centros de Enfriamiento y Duchas en Spray de New York
Cuando la temperatura se vuelve insoportable, New York City abre más de 500 centros de enfriamiento: espacios con aire acondicionado en centros comunitarios, bibliotecas y centros para personas mayores, donde cualquiera puede refrescarse gratuitamente.
Llama al 311 o usa el buscador de centros de enfriamiento en línea. Algunos están reservados para personas mayores, así que verifica antes de ir. Las duchas en spray y otras fuentes públicas de agua también son una forma divertida y gratuita de refrescarse, especialmente para los niños. Puedes encontrarlas en parques infantiles, plazas y en instalaciones temporales en las calles.
Recuerda que no está permitido abrir los hidrantes, a menos que lo haga el Departamento de Bomberos de NYC (FDNY). Además de ser ilegal, es peligroso y desperdicia agua esencial para emergencias.
Nunca Dejes Niños ni Mascotas en el Auto
Este consejo puede salvar vidas: un carro puede convertirse en un horno en cuestión de minutos. Según la Academia Americana de Pediatría, la temperatura dentro de un vehículo puede aumentar 40°F en menos de una hora, incluso si afuera solo hay 70°F. La mayor parte de este calentamiento ocurre en los primeros 15 a 30 minutos, y abrir las ventanas o estacionarse a la sombra no ofrece suficiente alivio. Si vas a hacer diligencias, deja a los niños y mascotas en casa o llévalos contigo.
Prevención del Golpe de Calor
Ya sea que trabajes al aire libre, estés viajando o simplemente caminando, la hipertermia (exceso de calor corporal) representa un riesgo real. Por eso es esencial tomar precauciones. Hidrátate constantemente con agua, bebidas con electrolitos o infusiones de frutas, y evita el café y el alcohol.
Usa cortinas y abre las ventanas por la noche para dejar entrar la brisa. Viste ropa clara y transpirable como algodón o lino. Intenta hacer tus diligencias fuera del horario de mayor calor, entre 2 y 4 de la tarde. Si comienzas a sentirte mareado, con náuseas o sudoración excesiva, busca sombra o entra a un lugar fresco.
El verano en Nueva York puede ser una maravilla sin necesidad de sudar de más, gracias a todos los recursos disponibles para mantenerte fresco y seguro. La ciudad lo tiene todo: desde piscinas gratuitas y centros de enfriamiento, hasta consejos útiles sobre hidratación y uso de energía.
Todo se trata de planificar bien, respetar el calor y aprovechar lo que la ciudad te ofrece. Solo necesitas tu toalla, una botella de agua y bloqueador solar para disfrutar la temporada manteniéndote fresco, seguro y cuidando también de los demás.
