Cleveland. — Tyrese Haliburton volvió a demostrar por qué es el líder indiscutible de los Pacers de Indiana, al encestar un triple decisivo con 1.1 segundos en el reloj para sellar una victoria de infarto 120-119 sobre los Cavaliers de Cleveland, tomando una sorpresiva ventaja de 2-0 en la serie semifinal de la Conferencia Este.
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En un cierre dramático, Indiana anotó los últimos ocho puntos del partido en apenas 47.9 segundos. Haliburton, quien sumó 11 de sus 19 unidades en el último cuarto, fue clave en la remontada ante unos Cavaliers que llegaron diezmados y no lograron cerrar el juego en casa.
La jugada que cambió todo ocurrió tras un robo de Andrew Nembhard a Max Strus con 27.5 segundos restantes. Con el balón en manos de Haliburton, los Pacers buscaron empatar. El base penetró y fue a la línea de tiros libres, donde convirtió el primero pero falló el segundo. Sin embargo, él mismo capturó el rebote ofensivo, retrocedió hasta la parte superior de la llave y conectó el triple que silenció al público en Cleveland.
“Estaba molesto porque fallé la bandeja y no pude mantener el balón”, confesó Haliburton. “Así que retrocedí. Vi a Ty Jerome frente a mí, y simplemente lancé. Esto es la NBA; han pasado cosas más locas. Así es el baloncesto. No nos rendimos. Estamos probados en batalla.”
Los Cavaliers, máximos preclasificados del Este, sufrieron su segunda derrota consecutiva en casa y ahora deberán responder con urgencia en el tercer juego, que se disputará en Indianápolis.
Con confianza y sangre fría, Haliburton y los Pacers continúan desafiando las expectativas, ahora a solo dos victorias de alcanzar la final de conferencia.
