Santo Domingo.- Los allegados de la joven Pamela Almánzar, de 30 años, quien era descrita como una persona muy buena, exigen justicia tras su trágica muerte a raíz de una cirugía estética.
Anyelina Encarnación, amiga y vecina de la fallecida, relató que Pamela acudió a la clínica el 16 de diciembre para realizarse una cirugía de reducción de senos. Sin embargo, además de esta intervención, fue sometida sin su consentimiento previo a una abdominoplastia y una liposucción en brazos y piernas, procedimientos que, según la familia, no fueron autorizados por ella.
«El acostumbraba a hacer cosas que no se le solicitan», dijo Encarnación.
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Narró también que, después de la operación, Pamela comenzó a sentirse muy mal, incluso empezó a perder color. Ante esta situación, la familia tuvo que regresar a la clínica, donde la joven fue atendida. Sin embargo, a su pareja le pidieron que fuera a comprar algunos medicamentos.
«Cuando su pareja llegó, le dijeron que ya no había nada que hacer, que ya había muerto. Lo mandaron a comprar medicamentos para hacer todos sus disparates ahí adentro con ella», dijo.
Por ello, este domingo Encarnación hizo un llamado exigiendo que esta persona fuera detenida.
«Es un inhumano, no es una ni dos las veces que él ha matado a mujeres. Ya está bueno de que todas estas muertes queden impunes. La familia exige justicia», enfatizó.
Otra persona cercana a Pamela, identificada como Yomaris Amezquita, nos compartió que la joven estaba pasando por una depresión, lo que la llevó a someterse a la cirugía. Además, relató que desde la operación del 16 de diciembre hasta el día de su fallecimiento, el 27 de diciembre, Pamela sufrió mucho dolor.
«Ella me dijo que le pusieron dos pintas de sangre, y se había desmayado varias veces. O sea, todo lo que ese señor le hizo le trajo consecuencias hasta llevarla a la muerte», expresó Amezquita.
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